Glosario

1. Falta de asesoramiento o consejo previo al aborto.
2. Aborto inducido por un proveedor no calificado, con frecuencia en condiciones poco higiénicas, o por un profesional de salud fuera de instalaciones de salud oficiales/adecuadas.
3. Aborto auto inducido por la ingestión de medicamentos tradicionales o sustancias peligrosas.
4. Aborto provocado por la inserción de un objeto en el útero de la mujer o por un médico tradicional o por un masaje abdominal violento.
5. Aborto médico prescrito incorrectamente o medicación emitida por un farmacéutico sin instrucciones o con instrucciones incorrectas y sin seguimiento.

El abuso sexual incluye como la violación (violencia sexual que incluye alguna forma de penetración en el cuerpo de la víctima), violación en el matrimonio e intento de violación. Otros tipos de actividad sexual forzada incluyen: ser forzada a mirar a otra persona masturbarse o a masturbarse delante de otras personas, ser forzada a tener sexo sin protección, acoso sexual y, en el caso de las mujeres, abuso en relación a la reproducción (embarazo forzado, aborto forzado, esterilización forzada).

De acuerdo al Fondo de Población de Naciones Unidas, un paquete completo de salud sexual y reproductiva incluye: Servicios de planeación familiar/espaciamiento de los nacimientos, atención prenatal, atención calificada en el parto y atención postnatal; manejo de complicaciones obstétricas y neonatales y de emergencias; prevención del aborto y tratamiento de las complicaciones resultantes de abortos inseguros; prevención y tratamiento de infecciones del tracto reproductivo y de infecciones de transmisión sexual incluyendo VIH/SIDA; diagnóstico temprano y tratamiento para el cáncer de mama y cervical; promoción, educación y apoyo a la lactancia materna exclusiva; prevención y tratamiento apropiado de su fertilidad e infertilidad; desaliento activo de las prácticas nocivas como la mutilación genital femenina; salud sexual y reproductiva del adolescente; prevención y manejo de la violencia basada en género.

Las Naciones Unidas considera que el termino adolescentes incluye a las personas entre 10 y 19 años y que jóvenes son aquellos entre 15 y 24 años para fines estadísticos, sin prejuicio de otras definiciones por los Estados Miembros. Juntos, adolescentes y jóvenes, se denominan juventud, que abarca las edades 10 a 24 años.

La anticoncepción de emergencia, o anticoncepción post-coital, se refiere a los métodos de anticoncepción que se pueden utilizar para prevenir el embarazo en los primeros días después del coito. Está pensado para el uso de emergencia después de una relación sexual sin protección, falla o uso indebido de anticonceptivos (como píldoras olvidadas o condones rotos), violación o sexo forzado. La anticoncepción de emergencia es eficaz sólo en los primeros días después del coito antes de que el óvulo se libere del ovario y antes de que el esperma fertilice el óvulo. Las píldoras anticonceptivas de emergencia no pueden interrumpir un embarazo establecido ni dañar un embrión en desarrollo.

De acuerdo con UNFPA, el Programa de Acción de la CIPD, aprobado en 1994 por 179 Estados Miembros, establece un plan de largo alcance para promover el bienestar humano, que sitúa los derechos humanos de las personas, en lugar de los objetivos demográficos cuantitativos, en el centro de la agenda mundial para el desarrollo. Destaca el valor de invertir en las mujeres y las niñas, como un fin en sí mismo y como un elemento esencial para mejorar la calidad de vida de toda la población y afirma la importancia de la salud sexual y reproductiva, incluida la planificación familiar, como requisito previo para el empoderamiento de la mujer. Exige, asimismo, que se ponga fin a la violencia por razón de género y a las prácticas tradicionales perjudiciales, como la mutilación genital femenina. Además, el Programa de Acción destaca los vínculos fundamentales existentes entre la salud y los derechos sexuales y reproductivos y casi cualquier aspecto de la población y el desarrollo, desde la urbanización, la migración y el envejecimiento hasta la modificación de las estructuras familiares y la importancia de tener en cuenta los derechos de los jóvenes. Llama la atención sobre las formas en las que la inversión en las mujeres y la juventud, especialmente en los aspectos relativos a su salud sexual y reproductiva, puede afectar a la sostenibilidad medioambiental y a la dinámica de la población.

El Consenso de Montevideo sobre la Población y el Desarrollo fue el resultado de la primera reunión de la Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo en América Latina y el Caribe, la cual tomo lugar en agosto del 2013, en la ciudad de Montevideo, Uruguay. Este acuerdo es uno de los documentos más progresistas en todo el mundo en temas de salud y derechos sexuales y reproductivos. Este acuerdo histórico es el primero en el mundo en reconocer los derechos sexuales como derechos humanos. Además de haber reafirmado los compromisos adquiridos en la Conferencia Internacional del Cairo sobre la Población y el Desarrollo - Programa de Acción (CIPD), los compromisos adquiridos en el Consenso de Montevideo sobre la salud sexual y reproductiva abren la posibilidad de avanzar en cuestiones claves como el derecho a la educación integral en sexualidad, y la eliminación de la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género.

Se define como la constelación de métodos, técnicas y servicios que contribuyen a la salud reproductiva y el bienestar mediante la prevención y resolución de problemas de salud reproductiva. También incluye la salud sexual, cuyo objetivo es la mejora de la vida y las relaciones personales, y no sólo el asesoramiento y la atención relacionados con la reproducción y las enfermedades de transmisión sexual.

1. Disponibilidad: una cantidad suficiente de servicios, establecimientos, productos y programas de salud pública y de cuidado a la salud en operación.
2. Accesibilidad: Establecimientos, bienes y servicios de salud accesibles para todos. La Accesibilidad presenta cuatro dimensiones superpuestas: - No discriminación - accesibilidad física - accesibilidad económica (asequibilidad) - accesibilidad a la información
3. Aceptabilidad: todos los establecimientos, bienes y servicios de salud deben ser respetuosos de la ética médica y culturalmente apropiados, así como sensibles a los requisitos de género y del ciclo de vida.
4. Calidad: los establecimientos, bienes y servicios de salud deben ser científica y médicamente apropiados y de buena calidad.

De acuerdo a lo acordado en la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo, los derechos reproductivos abarcan ciertos derechos humanos que ya están reconocidos en leyes nacionales, documentos internacionales sobre derechos humanos y otros documentos de consenso. Estos derechos se basan en el reconocimiento del derecho básico de todas las parejas y personas a decidir libre y responsablemente el número, espaciamiento y sincronización de sus hijos y a disponer de la información y los medios para hacerlo y del derecho de obtener el nivel más alto posible de salud sexual y reproductiva. También incluye su derecho a tomar decisiones en relación a la reproducción sin discriminación, coerción y violencia, como se expresa en documentos sobre derechos humanos.

De acuerdo con la Organización Mundial de Salud, la satisfacción de la salud sexual está ligada a la medida en la que se respetan, protegen y cumplen los derechos humanos. Los derechos sexuales abarcan ciertos derechos humanos que ya están reconocidos en leyes nacionales, documentos regionales e internacionales sobre derechos humanos y otros documentos de consenso. Los derechos fundamentales para la realización de la salud sexual incluyen: los derechos a la igualdad y a la no discriminación, el derecho a estar libre de tortura o trato cruel, inhumano o degradante o castigo, el derecho a la privacidad, los derechos al nivel más alto posible de salud sexual y reproductiva (incluyendo la salud sexual) y a la seguridad social, el derecho a casarse, a fundar una familia y contraer matrimonio con el libre y pleno consentimiento de los cónyuges y a la igualdad en y a la disolución del matrimonio, el derecho a decidir el número y espaciamiento de los hijos, los derechos a la información, así como a la educación, los derechos a la libertad de opinión y de expresión, y el derecho a un recurso efectivo para las violaciones de los derechos fundamentales. El ejercicio responsable de los derechos humanos requiere que todas las personas respeten los derechos de los demás. La aplicación de los derechos humanos existentes a la sexualidad y a la salud sexual constituye los derechos sexuales. Los derechos sexuales protegen los derechos de todas las personas a satisfacer y expresar su sexualidad y a disfrutar de la salud sexual con el debido respeto por los derechos de los demás y en un marco de protección contra la discriminación.

De acuerdo con UNESCO, la Educación Integral en Sexualidad provee un enfoque apropiado para la edad y culturalmente relevante de la enseñanza sobre el sexo y las relaciones que proporcione información científicamente correcta, realista, sin prejuicios. La educación sexual ofrece oportunidades para explorar las actitudes y los valores propios y construir habilidades de toma de decisiones, comunicación y de reducción de riesgo sobre muchos aspectos de la sexualidad.

Según ONU Mujeres, se refiere a los atributos y oportunidades sociales asociados a ser hombre y mujer, y a las relaciones entre mujeres y hombres y niñas y niños, así como las relaciones entre mujeres y hombres. Estos atributos, oportunidades y relaciones se construyen socialmente y se aprenden a través de procesos de socialización. Son contextuales / temporales y cambiables. El género determina lo que se espera, se permite y se valora en una mujer o un hombre en un contexto dado. En la mayoría de las sociedades hay diferencias y desigualdades entre mujeres y hombres en las responsabilidades asignadas, las actividades realizadas, el acceso y el control sobre los recursos, así como las oportunidades de toma de decisiones. El género es parte del contexto sociocultural más amplio. Otros criterios importantes para el análisis sociocultural son la clase, la raza, el nivel de pobreza, el grupo étnico y la edad.

La identidad de género se refiere a la experiencia interna y personal de género, que puede o no corresponder con el sexo asignado al nacer, incluyendo el sentido personal del cuerpo (que puede implicar, si se elige libremente, la modificación de la apariencia o función corporal por medios médicos, quirúrgicos u otros medios) y otras expresiones de género, incluyendo el vestido, el habla y los manierismos.

Las infecciones de transmisión sexual (ITS) son infecciones que se transmiten principalmente a través de contacto sexual entre personas. Hay más de 30 bacterias, virus y parásitos diferentes sexualmente transmisibles. Las afecciones más comunes que causan son gonorrea, clamidiasis, sífilis, tricomoniasis, chancro, herpes genital, verrugas genitales, infección por virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y la infección de hepatitis B. Algunos de ellos, en particular el VIH y la sífilis, pueden transmitirse también de madre a hijo durante el embarazo y el parto y a través de productos sanguíneos y por transferencia de tejido.

La laicidad es una postura filosófica que separa el ámbito político de lo religioso. Tiene 3 principios fundamentales: el respeto a la libertad de conciencia, la autonomía de lo político frente a lo religioso, así como garantizar la igualdad y la no discriminación. Así entendida, la laicidad es la base indiscutible para el respeto y promoción del ejercicio de los derechos porque garantiza que los asuntos políticos estarán basados en criterios científicos, donde impera la soberanía popular por sobre dogmas morales provenientes de una iglesia o credo particular. Mientras que la secularización es el proceso por el cual la sociedad va alejándose de formas de legitimaciones religiosas. Comienza a partir del momento en que la religión y sus instituciones pierden influencia y otras esferas del saber van ocupando su lugar, tanto en lo cultural como en las formaciones sociales.

Según la OMS, se consideran esenciales los medicamentos que cubren las necesidades de atención de salud prioritarias de la población. Su selección se hace atendiendo a la prevalencia de las enfermedades y a su seguridad, eficacia y costo eficacia comparativa. Se pretende que, en el contexto de los sistemas de salud existentes, los medicamentos esenciales estén disponibles en todo momento, en cantidades suficientes, en las formas farmacéuticas apropiadas, con una calidad garantizada, y a un precio asequible para las personas y para la comunidad.

Las medidas prioritarias del Consenso de Montevideo representan 108 compromisos que abarcan múltiples temáticas y distintas poblaciones clave distribuidas entre nueve capítulos temáticos y uno sobre marcos para la implementación.

De acuerdo a la OMS, la muerte materna es la muerte de una mujer mientras está embarazada o dentro de los 42 días siguientes a la terminación del embarazo, independientemente de la duración y el sitio del embarazo, por cualquier causa relacionada con o agravada por el embarazo mismo o su atención, pero no por causas accidentales o incidentales. La mortalidad materna es mayor en las zonas rurales y en las comunidades más pobres. Las jóvenes adolescentes, en comparación con otras mujeres, corren el mayor riesgo de complicaciones y muerte a consecuencia del embarazo.

La orientación sexual se refiere a la capacidad de cada persona para una profunda atracción emocional, afectiva y sexual hacia, e íntimas y relaciones sexuales con, individuos de un género diferente o del mismo género o más de un género.

Un paquete completo de salud sexual y reproductiva incluye: Servicios de planeación familiar/espaciamiento de los nacimientos, atención prenatal, atención calificada en el parto y atención postnatal; manejo de complicaciones obstétricas y neonatales y de emergencias; prevención del aborto y tratamiento de las complicaciones resultantes de abortos inseguros; prevención y tratamiento de infecciones del tracto reproductivo y de infecciones de transmisión sexual incluyendo VIH/SIDA; diagnóstico temprano y tratamiento para el cáncer de mama y cervical; promoción, educación y apoyo a la lactancia materna exclusiva; prevención y tratamiento apropiado de subfertilidad e infertilidad; desaliento activo de las prácticas nocivas como la mutilación genital femenina; salud sexual y reproductiva del adolescente; prevención y manejo de la violencia basada en género.

Aunque la OMS no tiene una definición de parto humanizado, otras organizaciones lo definen usando las recomendaciones de la OMS. El concepto de Parto Humanizado se puede definir como una propuesta integral hacia la maternidad en todas sus etapas, desde el embarazo hasta el posparto (partohumanizado.org). Una modalidad de atención del parto caracterizada por el respeto a los derechos de los padres y los niños y niñas en el momento del nacimiento. Es decir, en consonancia con las necesidades y deseos de la familia que va a dar a luz. Cuando se habla de parto humanizado, se habla de generar un espacio familiar donde la mamá y su bebé sean los protagonistas y donde el nacimiento se desarrolle de la manera más natural posible.

La planificación familiar permite a los individuos ya las parejas anticipar y alcanzar el número deseado de niños y el espaciamiento y el momento de sus nacimientos. Se logra mediante el uso de métodos anticonceptivos y el tratamiento de la infertilidad involuntaria. La capacidad de una mujer para espaciar y limitar sus embarazos tiene un impacto directo en su salud y bienestar, así como en el resultado de cada embarazo.

Según la definición del Programa De Las Naciones Unidas Para El Desarrollo, la rendición de cuentas es la obligación de quienes tienen el poder de asumir responsabilidad por sus acciones. Describe los derechos y las responsabilidades que existen entre las personas y las instituciones que tienen un impacto en sus vidas (incluyendo los gobiernos, la sociedad civil y los agentes del mercado). En los Estados democráticos, la rendición de cuentas ayuda a asegurar que los tomadores de decisiones adhieran a los estándares, normas y objetivos acordados públicamente: los ciudadanos le otorgan poderes a su gobierno para recaudar impuestos, gastar, y promulgar y aplicar leyes y políticas. A cambio, éstos esperan que el Gobierno explique y justifique el uso del poder, y tome medidas correctivas cuando sea necesario.

Los servicios de salud materna, con base en el concepto de elección informada, deben incluir educación sobre la maternidad sin riesgo, cuidados prenatales centrados y efectivos, programas de nutrición materna, provisión adecuada de asistencia que evite el recurso excesivo de cesáreas y atención de las emergencias obstétricas; servicios de referencia para las complicaciones del embarazo, el parto y el aborto, y atención postnatal y planificación familiar. Todos los nacimientos deben ser asistidos por personas especializadas, preferiblemente enfermeras y parteras, pero al menos por asistentes de parto entrenados. Se deben identificar las causas de origen de la mortalidad y la morbilidad materna y se debe prestar atención al desarrollo de estrategias para superarlos y para que los mecanismos adecuados de evaluación y de monitoreo evalúen los progresos realizados en la reducción de la morbilidad y la mortalidad materna y para mejorar la efectividad de los programas en curso. Se deben desarrollar programas y educación para atraer el apoyo de los hombres para la salud materna y maternidad sin riesgo.

La salud reproductiva es un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad o afección, en todos los aspectos relacionados con el sistema reproductivo y sus funciones y procesos. La salud reproductiva implica, entonces, que las personas sean capaces de tener una vida sexual satisfactoria y segura y que tengan la capacidad para reproducirse y la libertad de decidir si, cuándo y qué tan a menudo hacerlo. En esa última condición están implícitos el derecho de los hombres y las mujeres a ser informados y tener acceso a los métodos seguros, eficaces, asequibles y aceptables de su elección para la planeación familiar, así como a otros métodos de su elección para la regulación de la fertilidad que no estén en contra de la ley, y el derecho de acceso a los servicios de salud apropiados que permitan a las mujeres pasar con seguridad por el embarazo y el parto y que provean a las parejas la mejor oportunidad de tener un niño sano. En consonancia con la definición anterior de salud reproductiva, el cuidado de la salud reproductiva se define como la constelación de métodos, técnicas y servicios que contribuyen a la salud reproductiva y al bienestar mediante la prevención y resolución de problemas de salud reproductiva. También incluye la salud sexual, cuyo objetivo es la mejora de la vida y las relaciones personales, y no sólo el asesoramiento y la atención relacionados con la reproducción y las enfermedades de transmisión sexual.

Un estado de bienestar físico, emocional, mental y social en relación con la sexualidad; No es solamente la ausencia de enfermedad, disfunción o afección. La salud sexual requiere un enfoque positivo y respetuoso frente a la sexualidad y a las relaciones sexuales, así como a la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de coerción, discriminación y violencia. Para alcanzar y mantener la salud sexual, se deben respetar, proteger y cumplir los derechos sexuales de todas las personas.

De acuerdo a lo acordado en la conferencia de Beijing, el término "violencia contra las mujeres" designa cualquier acto de violencia de género que resulte en, o sea probable que resulte en daño físico, sexual o psicológico o sufrimiento para las mujeres, incluidas las amenazas de tales actos, la coerción o la privación arbitraria de la libertad, ya sea en la vida pública o privada. En consecuencia, la violencia contra la mujer abarca pero no está limitada a lo siguiente: a) violencia física, sexual y psicológica que ocurre en la familia, incluyendo el maltrato o el abuso sexual de las niñas en el hogar, la violencia relacionada con la dote, la violación marital, la mutilación genital femenina y otras prácticas tradicionales nocivas para las mujeres, además de la violencia no conyugal y la violencia relacionada con la explotación; b) Violencia física, sexual y psicológica que ocurre dentro de la comunidad en general; incluyendo violación, abuso sexual, acoso sexual e intimidación en el trabajo, en instituciones educativas y en otros lugares, la trata de mujeres y la prostitución forzada; c) Violencia física, sexual y psicológica perpetrada o condonada por el Estado, dondequiera que ocurra.

De acuerdo con el Fondo de Población de las Naciones Unidas, la provisión eficiente de un paquete accesible, holístico y básico de cuidado de la salud para jóvenes incluye: - el acceso universal a la información precisa de salud sexual y reproductiva - una gama de métodos anticonceptivos seguros y asequibles - el asesoramiento sensible y la atención obstétrica de calidad para todas las mujeres y niñas embarazadas - la prevención y el tratamiento de infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH. Las características esenciales de los servicios accesibles para los jóvenes incluyen:- un horario conveniente - la garantía de privacidad - personal competente - respeto para los jóvenes - un paquete disponible de servicios esenciales - el suministro suficiente de materias primas y medicinas- una oferta de variedad de anticonceptivos - énfasis en la protección dual/condones masculinos y femeninos- referencias disponibles - garantía de confidencialidad - un tiempo de espera razonable- tarifas asequibles -espacios u horarios separados para jóvenes. Las características de respaldo de los servicios accesibles para los jóvenes incluyen: retroalimentación de los jóvenes respecto a las operaciones - ubicación accesible - publicidad que informe y tranquilice a los jóvenes - un ambiente cómodo - proveedores/consejeros pares disponibles - materiales educativos disponibles - bienvenida y servicio a parejas - orientado a personal no médico - provisión de oportunidades educativas adicionales - servicios de promoción disponibles.

Según la OMS, un aspecto central del ser humano a lo largo de la vida que abarca el sexo, las identidades y roles de género, la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción. La sexualidad se experimenta y expresa en pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, conductas, prácticas, roles y relaciones. Mientras que la sexualidad puede incluir todas estas dimensiones, no todas ellas se experimentan o expresan en todos los casos. La sexualidad se ve influenciada por la interacción de factores biológicos, psicológicos, sociales, económicos, políticos, culturales, legales, históricos, religiosos y espirituales.

Son aquellos productos, incluyendo medicamentos y métodos anticonceptivos, pero no limitados a ellos que son necesarios para brindar atención adecuada y de la más alta calidad a la salud sexual y reproductiva. Por otro lado, el registro sanitario es un documento legal que autoriza a personas o empresas para fabricar, distribuir y vender un producto dedicado al consumo humano, incluyendo los suministros para la salud sexual y reproductiva.

De acuerdo a la Organización Mundial de Salud, El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ataca el sistema inmunitario y debilita los sistemas de vigilancia y defensa contra las infecciones y algunos tipos de cáncer. A medida que el virus destruye las células inmunitarias y altera su función, la persona infectada se va volviendo gradualmente inmunodeficiente. La función inmunitaria se suele medir mediante el recuento de células CD4. La inmunodeficiencia entraña una mayor sensibilidad a muy diversas infecciones y enfermedades que las personas con un sistema inmunitario saludable pueden combatir. La fase más avanzada de la infección por el VIH se conoce como síndrome de inmunodeficiencia adquirida, o sida, y puede tardar entre 2 y 15 años en manifestarse, dependiendo del sujeto. El sida se define por la aparición de ciertos tipos de cáncer, infecciones u otras manifestaciones clínicas graves. Todos los servicios de asesoramiento y pruebas de detección deben regirse por los cinco principios fundamentales recomendados a este respecto por la OMS: consentimiento informado, confidencialidad, facilitación de orientación (o asesoramiento), garantía de que los resultados de la prueba son correctos, y vinculación con la asistencia, el tratamiento y otros servicios.

Se refiere al comportamiento de la pareja o ex pareja que causa daño físico, sexual o psicológico, incluidas la agresión física, la coacción sexual, el maltrato psicológico y las conductas de control.

Cualquier acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual u otro acto dirigido contra la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de su relación con la víctima, en cualquier ámbito. Comprende la violación, que se define como la penetración, mediante coerción física o de otra índole, de la vagina o el ano con el pene, otra parte del cuerpo o un objeto.